El Juvenil Instituto Fueguino, comenzó sus primeros pasos el 18 de marzo de 1991, con la incorporación otorgada por el Ministerio de Educación y Justicia de la Nación, bajo la característica U-8, de los establecimientos reconocidos a nivel nacional. Fue transferido a la Provincia, en forma conjunta con todos los colegios nacionales del medio, siendo la primera Institución laica que invirtió en educación en Tierra del Fuego.
Abrió sus puertas a 22 jóvenes adolescentes, con el Ciclo Básico Unificado, fomentando así el desarrollo cultural de la región y con fecha 6 de junio de ese mismo año, fue incorporado a la Enseñanza Oficial mediante Disposición N° 361- 91, como una alternativa a la gran demanda de vacantes para alumnos Secundarios que existía en aquel momento.
En 1994, abre sus puertas el Jardín de Infantes, con salitas de 3, 4 y 5 años y 1° grado de Nivel Primario, contando actualmente con un servicio educativo que abarca el Nivel Inicial, el Nivel Primario y la Enseñanza Secundaria Obligatoria, ofreciendo en su ciclo orientado, las Modalidades en Economía, Administración y Comunicación.
La Institución desplegó sus actividades en diversos locales desde su inicio: Laserre, Brown, Capilla Virgen del Carmen y finalmente Libertad 965 donde se desarrollan las actividades curriculares y extracurriculares. Actualmente, la Institución adhiere en su totalidad a lo dispuesto por la Ley de Educación Nacional en cuanto a su organización, convirtiendo a esta casa de estudios, en un verdadero centro de irradiación cultural de la Comunidad de Río Grande.
El Juvenil Instituto Fueguino, prepara alumnos para participar en la comunidad en la búsqueda del desarrollo y el progreso.
Fue el primer Instituto de la provincia que representara a la Argentina en la Feria Internacional de Ciencia y Tecnología en 1994, obteniendo un lugar de privilegio en la instancia final, orgullo de la Comunidad Educativa, de la ciudad de Río Grande y de la Provincia. A partir de esta experiencia, que en su momento resultó relevante, pero con el correr del tiempo se tornó competitiva, se instala en la Institución una Feria de Turismo, de la mano de la docente Mirtha María Sánchez de Tropea, la que después adopta la forma de una Muestra anual de Trabajos donde se exponen proyectos que durante el año escolar se van desarrollando en los distintos espacios curriculares y son expuestos a la comunidad durante dos jornadas en el mes de Julio de cada ciclo escolar.
Desde ese comienzo, varios fueron los trabajos que colocaron al JIF en un lugar visible ante la jurisdicción, el país y Latinoamérica, mediante la participación ininterrumpida en las Ferias de Ciencias con trabajos coordinados por las docentes Lic. Daniela Alejandra Martínez con quien se realizó un proceso de investigación sobre las mujeres de los pueblos originarios de Río Grande y Tierra del Fuego y Lic. Silvia Beatriz Gómez con la investigación sobre Malvinas. Esto permitió a los estudiantes involucrados en dichos proyectos, participar en otras provincias del país y en la ciudad de Bogotá, Colombia representando a Argentina.
El Juvenil Instituto Fueguino nació como una escuela inclusiva y desde su fundación conservó esa particularidad. El JIF siempre buscó incluir a los alumnos sin que tengan que acceder a una vacante por mérito, ya que considera que todas las personas son iguales pero particulares y allí es donde radica lo importante ya que la diversidad permite crecer y aprender con el otro.
En un determinado momento solo se integraba en la institución, sin tener la certeza de la posibilidad de dar respuesta a las necesidades de los alumnos, pero en este último tiempo la capacitación del plantel docente a cargo de grupos de padres y del Municipio local permitió que a partir del conocimiento se puedan ofrecer nuevas herramientas y poco a poco se trabaja para concretar la inclusión en el JIF. Además, se planteó a las obras sociales que cada niño necesitaba un acompañante terapéutico para que lo asista. Hoy concurren algunos niños con sus acompañantes y esto hace que el alumno viva de una manera diferente el proceso educativo.
Desde la escuela se trabaja mucho para generar el vínculo con los alumnos, hablar con los ellos, adoptando el sentido de permanencia y de pertenencia a la institución, reconociendo que este lugar es también su casa y que se sientan cómodos.
Cada año la institución vive de manera destacada el acto de la Promesa de Lealtad a la Bandera Nacional. Este acto se realiza el 20 de junio independientemente del día que caiga ya que se considera que esta fecha es sumamente importante para los alumnos por realizar la promesa a la Bandera Nacional, lo que quedará guardado en sus recuerdos, por lo que la fecha es inamovible.
Cada 2 de abril el Juvenil Instituto Fueguino acompaña a los Veteranos de guerra de Malvinas, en el desfile con entusiasmo y esmero. Las bastoneras, un grupo de niñas y adolescentes lideradas por alguna estudiante de los últimos cursos, iniciativa de una mamá que en el año 2003 propuso la conformación del grupo, siempre han estado presentes en los actos engalanando el mismo.
El Juvenil Instituto Fueguino, desarrolla varios proyectos institucionales que atraviesan a los diferentes niveles, que caracterizan su trayectoria en la comunidad y lo convierten en una propuesta confiable para las familias que buscan calidad y calidez para la educación formal de sus hijos.